¿Cuál es la Historia?

Narrativas de lo que acontece bajo la línea de flotación

La guerra en datos: refugiados ucranianos en Europa

Refugiados ucranianos

Esta es una de las grandes incongruencias del conflicto en Europa Oriental, por la cual nuestros medios de comunicación suelen pasar de puntillas. Cuando te preguntan por el país que más refugiados de guerra acoge, tu primer impulso es responder algo así como Alemania o Polonia (por lo demás una opción razonable, por la proximidad geográfica). La respuesta correcta es Rusia. Como se puede apreciar en este gráfico, cuyos datos proceden de la Cruz Roja Internacional, el portal Statista y otras fuentes públicas, el mayor contingente de refugiados ucranianos no ha huído a Polonia u otros países de Europa, sino en dirección este, hasta un número de casi 3 millones, que iguala la cifra de Alemania y Polonia juntas y supera con creces la cifra total de todos los restantes lugares de destino.

¿Cómo se explica que, siendo Rusia el país agresor, el mayor número de refugiados procedentes de Ucrania lo haya elegido como destino de su éxodo? Las causas son más simples de lo que parece. Todo se vuelve más fácil de entender cuando dejamos de considerar la guerra en clave narrativa de nuestros medios occidentales, como un duelo de héroes y villanos narrado por la CNN y videos de Youtube, para verlo como lo que realmente es: una desgracia, una catástrofe histórica y un fenómeno masivo de dislocación social y crisis aguda de la economía.

La guerra paraliza el sistema productivo de una nación. Todo lo que no sea actividad militar directa o trabajos para la defensa queda automáticamente relegado. De repente, sobran millones de puestos de trabajo y gran parte de la población pierde su sustento. Los niveles de vida descienden de un modo dramático, La falta de oportunidades laborales expulsa a más gente que la amenaza de los bombardeos y la violencia de la tropa -que por lo demás afecta solo a una pequeña franja de territorio en el este del país-.

En tal sentido, los conflictos armados actúan como una mano de hierro que exprime de modo inmisericorde la esponja de la economía nacional. El agua expulsada (en este caso la población) escurre hacia afuera en busca de nuevos recipientes que no tengan fugas. Por razones de proximidad geográfica, cultural y de idioma, así como de vínculos familiares, la mayor parte de los ucranianos emigran en dirección a Rusia. El resto parte hacia una aventura incierta en las sociedades de acogida de Europa Occidental. En España, por ejemplo, había 100.000 residentes ucranianos antes de la guerra. A día de hoy ese número ha aumentado hasta los 180.000.

Leave comment