Sánchez ha roto la baraja. Solo Ayuso podría frenar al Godzilla electoral.
Sánchez ha roto la baraja. Solo Ayuso podría frenar al Godzilla electoral.
Isabel Díaz Ayuso contribuye a la campaña electoral con un discurso basado en valores liberales, en medio de la apoteosis de las bases y cierto distanciamiento por parte de los cuadros del PP.
Alberto Núñez Feijóo inicia su trayectoria como líder de la oposición con un perfil extremadamente bajo. Hasta tal punto, que se podría pensar que ni siquiera le gusta estar en Génova.
Contra todo pronóstico, Ayuso podría ser candidata en las próximas Elecciones Generales y convertirse en la primera mujer presidenta del gobierno de la historia de España.
Ayuso es la gran revelación de la política española. No hay en ello nada de mágico ni de misterioso. El secreto de su éxito y su talento estratégico se explican a partir de unos pocos principios simples y decisivos.
El éxito de Ayuso se sostiene a sí mismo, tanto por los logros alcanzados como por la circunstancia de que solamente ella es capaz de gestionar la situación resultante de su victoria.
La resolución y la agresividad con la que la presidenta de Madrid contraataca en la crisis del PP es uno de los rasgos distintivos de su carácter y de su forma de hacer las cosas en política.
La pugna entre Ayuso y Casado es más que una guerra de despachos. Los verdaderos objetivos son el liderazgo del partido, la Presidencia del Gobierno y el futuro modelo económico de España.
Isabel Díaz Ayuso viaja con frecuencia a Estados Unidos. Y lo hace por los mismos motivos que el Presidente del Gobierno: ganarse el apoyo de los inversores institucionales.
Aun no se dan las condiciones propicias para que Isabel Díaz Ayuso sea Presidenta del Gobierno. Tampoco lo necesita: un Madrid boyante es mucho mejor que un Estado de Partidos arruinado por la crisis del Covid-19.